Día de Navidad (Naviduvi para los amigos)
Hoy es el día de Navidad y tengo que reconocer que son fechas que me gustan, las disfruto y no me paro a contemplar la parte negativa de la Navidad, que igual que todo en este mundo pues la tiene.
Esa parte consumista, que no me contagia especialmente, es como todo, si te organizas bien recibes más intensamente la parte positiva que la negativa.
No caigo en el juego de felicitar a todo el mundo, gente que durante todo el año no les importo pues en estas fechas no hace falta que saquen sus mejores caras, porque de nada les sirve. También está la parte de que cuando falta gente que realmente te importa cuesta un poco más, pero en mi caso no es así, la verdad es que yo les echo de menos todo el año, cuando es su cumpleaños, cuando es el mío y no pueden sentarse a mi mesa a celebrarlo conmigo, cuando tengo la necesidad en el día a día de escribir o llamar a esa persona para contarle cosas o preguntarle qué tal va ella… en fin… que no es porque sea Navidad que quiero ni extraño más o menos a nadie.
Tampoco entro en las grandes comilonas ni en juntar a 40 personas en el mismo comedor sólo porque “hay que juntarse”. De hecho, he hecho como siempre, he desayunado como una campeona y luego me he encontrado sin apetito a la hora de la comida, con lo cual, la he pospuesto, sin dramas, de forma natural, no porque sea Navidad las cosas deben hacerse “porque tocan”.
Yo voy más allá, me encanta la decoración navideña, los platos que cocinan muchos de nuestros mayores, sean madres, padres, abuelos, abuelas, tíos, tías, quién sabe… Valoro todo ese esfuerzo que se está llevando a cabo en millones de hogares, con o sin lujos, la cosa es que la gente invierte tiempo, ganas, ilusión, ideas, etc… será que como son días libres se dispone de algo más de tiempo, es posible. Pero bueno, esto es simplemente mi punto de vista.
Particularmente he tenido un día agradable, tranquilo, amoroso, he tenido tiempo de pensar, de pasear, de reír con mucho gusto, de desayunar con calma, de tomar un té en la mejor de las compañías, de hablar con familia y amigos, en fin, un buen día… Valoro esas pequeñas cosas que hacen que un día normal se convierta en un recuerdo especial gracias a pequeños pero bonitos momentos.
Animo a todas esas personas que no se sienten cómodas en estas fechas a que sólo valoren de la Navidad las cosas que son auténticas, podemos dedicar a nuestras aficiones o a cualquier cosa que nos haga sentir bien, tenga o no que ver con la Navidad.
Y para terminar desear unas felices fiestas a todos los que me leéis y daros las gracias por hacerlo. Disfrutar de cada momento, sea la época que sea, porque la vida es muy breve. Desde mi pequeño rincón: ¡¡FELIZ NAVIDAD!!